Recuerdo la época en que mi esposa y yo planeábamos nuestro primer viaje por carretera desde la costa este a la costa oeste de Estados Unidos. Llevamos nuestro vehículo a un mecánico certificado para asegurarnos de que se realizara mantenimiento o cambio de neumáticos, ruedas, frenos, motor y todos los líquidos del vehículo. Así, nos sentimos seguros antes del viaje. La planificación previa al viaje es una gestión de riesgos eficaz que ayuda a garantizar que un viaje no solo sea seguro sino también agradable.
En nuestras iglesias y organizaciones locales, últimamente no se ha dado tanto uso a autobuses y camionetas debido a la pandemia. Con la reapertura de las iglesias y escuelas, la necesidad de contar con un medio de transporte es inminente. Para reducir el riesgo y garantizar un viaje sin problemas, es esencial que nos aseguremos de que el mantenimiento de los vehículos esté totalmente al día. Como buenos administradores de la iglesia o de la escuela, es importante poner a prueba el vehículo e identificar posibles problemas de seguridad. Llevar a cabo inspecciones previas al viaje y realizar el correspondiente mantenimiento a los vehículos son dos formas fiables de garantizar la seguridad. ¿Cuándo fue la última vez que se realizó una inspección del vehículo? ¿Ha realizado alguna otra evaluación, tal vez sobre el mantenimiento de su autobús o camioneta?Más vale prevenir que reparar. Si sigue los siguientes pasos, podría ayudar a proteger la vida de los miembros de su iglesia y de los estudiantes:
Mantenimiento de los vehículos
Realice el mantenimiento del vehículo en forma sistemática y periódica según las recomendaciones del fabricante, incluido el cambio de aceite. Si usted corre y no se hidrata lo suficiente, podría experimentar sed, mareos y desmayos y arriesgarse a sufrir complicaciones graves. Del mismo modo, si no verifica el nivel de aceite del motor, correrá el riesgo de que se dañe y falle, y eso afectará la capacidad de funcionamiento del vehículo. Este es uno de los elementos más importantes del mantenimiento del vehículo y no debe ignorarse.Además del servicio recomendado por los profesionales, aconsejamos los siguientes pasos para garantizar que el vehículo esté listo para su uso:
- Verifique la presión de los neumáticos. Es peligroso conducir cuando la presión de aire de uno o más neumáticos está fuera de las PSI (libras por pulgada cuadrada) recomendadas. Verifique las PSI de su vehículo con el fabricante. También puede utilizar un manómetro de neumáticos para verificar la profundidad de la banda de rodadura de los neumáticos de cualquier vehículo que no se haya utilizado durante un período prolongado. De este modo pueden evitarse daños graves.
- Conduzca el vehículo con regularidad. El truco aquí no es necesariamente conducir lejos, sino arrancar el motor periódicamente. Un viaje de cinco minutos por lo menos cada dos semanas es suficiente para poner en movimiento los líquidos del vehículo. Conducir con regularidad el vehículo también mantiene la batería cargada, los mecanismos lubricados, y evita que los frenos se oxiden o se fundan.[i] [ii] [iii]
- Antes de utilizarlo, realice una inspección del vehículo. Adventist Risk Management, Inc. (ARM) proporciona un Formulario de inspección de vehículo previa al viaje, un recurso valioso para llevar un registro de los componentes clave en el interior, en el exterior y debajo del capó. Este formulario le permite identificar exactamente lo que funciona y lo que necesita reparación antes de que sea demasiado tarde.
Prevención de accidentes
Puede reducir sus posibilidades de tener un accidente si realiza las siguientes acciones:- Evitar el riesgo. Si observa un problema de reparación o mantenimiento que podría provocar un accidente, interrumpa o cancele el viaje. Por ejemplo, utilizar neumáticos parcialmente desinflados puede causar accidentes peligrosos. Antes de utilizar los neumáticos, asegúrese de que tengan las PSI recomendadas por el fabricante.
- Reducir o eliminar las distracciones. Durante su viaje, es crucial que mantenga una atención constante a lo que sucede a su alrededor. Las distracciones pueden lentificar el tiempo de reacción cuando conduce, así que tenga en cuenta las siguientes distracciones comunes:
- uso de teléfono
- aplicación de maquillaje
- tener comida o bebida a mano
- soñar despierto
- agotamiento
- Tener cuidado de no conducir demasiado tiempo. Planifique cambiar de conductores o tomar descansos para estar atento mientras conduce.
- Aumentar la conciencia en la oscuridad. Conducir de frente al sol saliente o poniente puede causar deslumbramiento por el sol y disminuir la visibilidad. Una baja visibilidad aumenta las oportunidades de que se produzcan choques.
- Adaptarse a las estaciones. Todas las estaciones son bellas, especialmente con los cambios de tiempo. Estos cambios de tiempo pueden afectar las condiciones de la carretera y el manejo del vehículo. Es importante reducir la velocidad, adaptarse al clima y conducir con precaución cuando las condiciones son peligrosas.