«Gracias» es una palabra que puede transformar comportamientos, actitudes, e incluso una respuesta facial. A nuestros hijos les enseñamos que son muestras habituales de urbanidad y buenas costumbres. Sin embargo, muchos somos culpables por no agradecer a los héroes silenciosos de las instalaciones de nuestra iglesia, escuela y campamento: nuestros oficiales de seguridad.
Ellos son responsables de evaluar los peligros que se observan y de anticiparse a otras amenazas de seguridad en su instalación. Trabajan junto al liderazgo de su ministerio con el objetivo de implementar protecciones para velar por usted y por las personas que nos visitan. El trabajo que realizan entre bastidores es el que minimiza la cantidad de contratiempos y continúa impulsando la seguridad.Para mostrar nuestro agradecimiento, hagamos lo siguiente:
No dejemos basura en el suelo: Una de las reclamaciones de seguro más frecuentes se debe a resbalones, tropezones y caídas. Ya sea un pliegue en una alfombra o un charco en un piso de baldosa, es un peligro para la seguridad de cualquier transeúnte. Demuestre su agradecimiento a los oficiales de seguridad; resuelva estos riesgos en cuanto los observe. Arregle la alfombra, limpie el charco de agua o ponga un cartel para advertir del peligro a otras personas. Durante la temporada invernal, haga su parte y use herramientas para derretir el hielo de escalones, entradas y otras superficies potencialmente resbaladizas. Antes de escurrir el paraguas en la entrada de baldosas, piense en otras personas que vendrán después y limpie los charcos de agua que deje a su paso.
Informemos de inmediato los peligros para la seguridad: Un oficial de seguridad no puede estar en todas partes al mismo tiempo, de manera que deberíamos informarle acerca de cualquier peligro potencial en cuanto lo observemos. Si observa una grieta en el techo del baño, una rotura en la acera que produce una superficie desigual o una grieta en la mesada de la cocina que hace que el agua se filtre, ¡dígalo! Informe al oficial de seguridad de su ministerio sobre estos peligros potenciales. La identificación de la grieta en la pared podría alertar a sus líderes sobre un daño estructural invisible que debería repararse lo más pronto posible. Si se repara la grieta en la acera podría evitarse un riesgo de tropiezo, que podría ocasionar accidentes innecesarios y costosos. Sellar la grieta en la mesada de la cocina podría evitar moho y daños por agua en la mesada.
Evitemos las potenciales violaciones a la seguridad: Antes de alejarse, aunque sea por un momento, de una pantalla de computadora desbloqueada de la iglesia, dedique un instante a resguardar toda la información de los miembros que podría quedar expuesta durante su ausencia. El robo de identidad continúa siendo un riesgo que enfrentan todas las organizaciones, grandes o pequeñas. Agradezca a su oficial de seguridad por preservar la seguridad de las instalaciones: dedique algunos momentos a guardar con seguridad la información de sus miembros. Asegure los dispositivos electrónicos de su espacio de trabajo, verifique nuevamente que las puertas y ventanas estén cerradas con llave. Cuando se vaya, cierre las persianas de las ventanas para evitar que intrusos tengan acceso o vean los recursos de su ministerio.
La seguridad también es importante para nuestros niños. Evite incidentes, planificando una supervisión adecuada durante las actividades juveniles. Evite toda oportunidad de abuso, manteniendo abiertas las puertas y ventanas de panel para que los transeúntes puedan ver lo que ocurre en el interior de un salón en todo momento. Controle a todos los voluntarios y miembros del personal con una verificación de antecedentes antes de que se los autorice a trabajar con niños y adolescentes.
Estas son solo algunas maneras de agradecer a nuestros oficiales de seguridad. Es nuestra responsabilidad apoyarlos y abordar en forma proactiva las cuestiones de seguridad. Mantenernos y mantener a salvo de daños a las personas que visitan nuestras instalaciones es una tarea que no puede desempeñar una sola persona. Debemos ayudar cada vez que observemos un tema de seguridad. En última instancia, preservamos nuestra seguridad y protegemos las inversiones de nuestro ministerio si estamos atentos a riesgos potenciales.
¡Demuestre hoy su agradecimiento a su oficial de seguridad: cumpla con su parte